martes, 3 de junio de 2008

EL TEMBLOR DOCENTE

Desarrollo mis prácticas en la Esc. Normal Sup. “Rep. del Ecuador”, en el espacio de psicología, en 3º año del Polimodal, concurro los días lunes y jueves.

La clase que relataré corresponde a la Unidad “Personalidad adolescente”, el tema es “la moda y la preocupación por el vestido y adicciones”

Mientras espero que los alumnos ingresen, preparo los relatos que serán usados como situación disparadora. Cuando ingresan todos los alumnos , les pido silencio, los chicos reducen los disturbios, entonces pido a uno de ellos que realice la lectura de uno de los relatos que se refiere a los cambios en la forma de vestir de una mujer al entrar a la etapa adolescente; el alumno , quien posee una voz bastante potente accede de forma cordial y con entusiasmo, logrando captar la atención de sus compañeros , cuando el alumno termina de leer, pregunto ¿ A qué se refiere esta situación?¿Cuál es la preocupación de la mujer del relato? y ¿Porqué? Un alumno contesta:-la ropa; otra alumna responde: -la inquietud que tiene por cómo se vestía y las diferentes modas que adoptó cuando estuvo en la adolescencia.¡Bien! contesté y pregunté ¿Ustedes tienen esa preocupación por la ropa que van a usar?,el alumno que realizó la lectura contesta:-los varones no tenemos esa preocupación como las mujeres; una alumna dice: - sí, es verdad lo que dice José Maria profe, nosotras cuando queremos salir ,estamos probándonos de todo. Entonces les dije:-¡Bien! A partir de lo que me dicen ¿Qué lugar tendrá la moda en la sociedad actual? Un alumno dice:-me parece que la moda ocupa el primer lugar, porque nuestra sociedad es consumista y materialista, y otro alumno dice:-si profe, Gaby tiene razón, hoy todos queremos estar al tanto del ultimo grito de la moda.-¡sí! Dice otra alumna, parece que si no estamos a la moda nos quedamos en el tiempo ¡Bien chicos! Contesté.

Luego pido a una alumna que realice la lectura del otro relato, que se refería a una persona adicta a las drogas., los alumnos escucharon en completo silencio, cuando la alumna termina de leer pregunto ¿Y, esta situación a que se refiere? , un alumno responde_ a las adicciones, a las drogas, contesté ¡Bien Nelson! Y pregunté ¿Por qué piensan que una persona puede volverse adicta a las drogas? un alumno responde:-hay muchos motivos, por ejemplo, que no tenga contención familiar, y ve en las drogas la mejor salida;¡Bien contesté! Y procedí a explicar cuales son los diferentes tipos de drogas que existen, su peligrosidad, como pueden generarse las adicciones, la diferencia entre uso y abuso de drogas, los síntomas de una persona que intenta dejar las drogas; como así también, realicé una breve explicación de la preocupación por la vestimenta en la adolescencia y la adopción de diferentes modas, entre ellas el consumo de drogas como medio de aceptación en el grupo de pares.

Luego les pedí que conformaran grupos para realizar algunas actividades y realizar la puesta en común de las mismas, que no pudo llevarse a cabo por cuestiones de tiempo.

Si bien esta clase puede parecer simple y hasta vacía de elementos que la enriquezcan, debo decir que para mí fue muy importante, ya que fue mi segunda clase, y a partir de la cual pude ir alcanzando una cierta apertura en el diálogo pedagógico con los alumnos, ya que mi primera clase fue realmente expositiva, es decir no había brindado a mis alumnos la posibilidad de preguntar o de exponer alguna duda, aunque a pesar de ello tuve la completa atención de ellos, teniendo en cuenta de que es un curso numeroso y a los cuales les cuesta hacer silencio.

A partir de esa primera clase, mi profesora de práctica, que la había observado, me mostró mis errores, debía empezar a corregirlos y esta clase fue la oportunidad para ello; considero que abrir el diálogo a través de las preguntas y di el tiempo para que los alumnos contesten, y no fui solo yo quien habló, pude encontrar esa ida y vuelta en la dinámica relación docente-alumno.

Esta clase me permitió sentir “el temblor del maestro” del que habla Jorge Larrosa, de saber lo que me pasa frente a mi grupo de alumnos, como así también de tomar conciencia de la responsabilidad que implica ser docente.

MARCELA GONZALEZ.

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